jueves, 12 de septiembre de 2013

Camino 2013: De Triacastela a Samos

Como ya dije en mi última entrada, la etapa recorrida el lunes 26 la dividí en dos, pues ese día me dió por fotografiar. A su vez por el interés de la visita al monasterio de Samos haré una tercera entrada dedicada al mismo.

Después d almorzar en el primer bar que se encuentra a la altura del albergue de la Xunta, recorrí la calle principal ahora plagada de albergues, casas rurales, restaurantes dedicados a peregrinos y turistas. Al final de esa calle nos encontramos desplazados hacia la derecha los indicadores, el izquierdo nos envía hacia Samos, el derecho directo a Sarria por San Xil.

Como yo quería repetir mi visita a Samos, me fui hacia la izquierda. Pase por una plaza de donde salían los autocares Rodríguez, para atender a los vecinos de la zona con un minibus. Siguiendo por la carretera en el primer tramo hasta poco antes de San Cristovo do Real, donde el camino se dirige al pueblo, por decir algo, pues son poco más de cuatro casas, a partir del cual sigue por el bosque o mejor dicho por la vegetación cercana al río. Lugar precioso que vas inmortalizando con la cámara fotográfica. Transcurre por una senda junto a los campos cercanos al río. Poco antes de Renche vuelve a la carretera.

San Cristovo do Real

San Cristovo do Real

casa rectoral de San Cristovo do Real

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

cementerio de San Cristovo do Real

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos. Éste pasó rápido, pues sólo llevaba una mochilita de paseo

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos


de San Cristovo do Real a Renche, camino a Samos

iglesia de San Martiño do Real, ya muy cerca de Samos


Como vi que el camino descendía hacia Freituxe, lo que suponía que luego debería volver a subir y ya nos íbamos pasando de las dos de la tarde, pensé que lo mejor era abreviar e intentar llegar cuanto antes, por lo que seguí por la carretera hasta San Martiño do Real que una vez pasado, aparece un atajo que desciende directamente a Samos. Llegado cerca del monasterio se pierden las flechas y por el principio de Murphy terminas dando la vuelta más larga.

el monasterio de Samos al fondo del valle

el monasterio de Samos al fondo del valle

bordeando el muro del monasterio de Samos

bordeando el muro del monasterio de Samos

bordeando el muro del monasterio de Samos

el monasterio de Samos

el monasterio de Samos

el monasterio de Samos

entrada principal a la iglesia y al monasterio de Samos


Ya pasaban de las tres de la tarde. Encontré el albergue abierto, puesto que aunque los hospitaleros comen en el monasterio, ahora hay dos turnos, por lo que a partir de la una se puede conseguir cama. Tras descalzarse, dejar el bordón en los lugares indicados, registrarse conseguí una cama baja. Luego la ducha, cambio de ropa y a incar el diente. Yo me recordaba de 1999 que comí en un asador, de lo poco que había entonces, pero como era lunes, estaba cerrado. Busqué otro sitio para apreciar la famosa carne de ternera gallega, concretamente de Lugo, donde me encontraba.

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